Estamos en época de crisis. Una crisis muy profunda para todo el sector de los eventos y del turismo, que desde el mes de marzo no ve un rayo de sol. Por ello, en momentos complicados, es más importante que nunca optimizar; optimizar energía, recursos y crear acciones de calidad que produzcan un gran impacto, independientemente del formato, la tipología o el presupuesto.
Por esta razón, quiero hablar en este artículo de la importancia de contar con un acompañamiento, también conocido como “coaching para eventos”, en el que, trabajando juntos, seamos capaces de extraer las mejores soluciones a desarrollar en cada acción. ¿Un punto a favor? Obtendremos una visión externa y totalmente objetiva.
¿Cuándo es necesario realizar este proceso? Cuando el entorno inevitablemente nos bloquea, no obtenemos los resultados esperados en los eventos realizados, la creatividad empieza a verse afectada y no estamos seguros de cómo enfocar la siguiente acción para conseguir un buen retorno.